La mayoría de los visitantes lo conoce desde un paseo a pie, pero pocos se dan cuenta de lo majestuoso que es verlo desde el nivel del río Vltava.
Los paseos en las "Venecias de Praga" ofrecen precisamente este ángulo único. Desde la cubierta de un barco histórico, se abre una vista de los arcos de piedra, las estatuas barrocas y las torres del puente tal y como los veían los constructores y los marineros hace siglos. Esta vista no solo es fotogénica, sino también profundamente simbólica: conecta el pasado con el presente.